A causa de la pandemia por Covid-19, en los últimos meses se ha vuelto obligatorio el uso de tapabocas para evitar el contagio de la enfermedad. Así también el uso continuado trae consigo lo que se conoce como acné por mascarilla o “maskné”, una erupción caracterizada por la aparición de granitos en la zona cubierta y que se produce debido a varias causas.
La Dra. Romina Contreras, especialista de la Cátedra y Servicio de Dermatología del Hospital de Clínicas, explicó que una de ellas es la fricción que ejerce el tapabocas sobre el rostro y también al aumento de la temperatura y la humedad, propiciando un microambiente ideal para el crecimiento de bacterias. “La fricción prolongada puede causar microtraumatismos favoreciendo la penetración de estas bacterias dentro de la piel”.
Manifestó además que este tipo de erupciones es más frecuente en pacientes con patología de base, entre ellas la rosácea, el acné, la dermatitis atópica o el eccema, aquellas personas que tienen sensibilidad a la humedad o al aire caliente, o que ya presentan una base alérgica.
¿Cómo diferenciar el maskné del acné del adolescente?
El acné del adolescente generalmente se caracteriza por comedones -puntos negros o pequeños granitos- que aparecen en todo el rostro, a veces también en escotes o en la espalda. En tanto el maskné aparece alrededor de la nariz, boca o barbilla, por la fricción de la mascarilla con la piel.
Si bien el acné es bastante frecuente en la adolescencia, también puede persistir más allá de esa franja etaria. En ese caso suele afectar más a las mujeres y se conoce como el acné de la mujer adulta, que es aquel acné que persiste luego de los 25 años de edad.
“El acné en sí es una patología que tiene una etiología multifactorial en la cual intervienen diversos factores, entre ellos la predisposición familiar, es decir hay más riesgo si hay antecedentes de acné en la familia, generalmente las pieles mixtas o las pieles grasas tienen mayor predisposición al acné”, indicó la profesional.
La alimentación también cumple un papel determinante en la aparición de este tipo de problemas de la piel. Existen alimentos que están directamente relacionados con el empeoramiento del acné en personas predispuestas. Por ejemplo el exceso de consumo de lácteos, las comidas con un índice glucémico elevado como los alimentos con alta cantidad de carbohidratos o con mucho contenido de azúcar, pueden empeorar el acné en ciertas personas.
Para evitar la aparición del maskné, la dermatóloga recomienda optar por tapabocas de algodón o de seda que causan menos fricción y traumatizan menos la piel; hacer pequeñas pausas cuando sea posible, para que la piel pueda respirar.
“Ya cuando hay áreas irritadas se indica el uso de pastas o cremas de barrera que contengan óxido de zinc, que generalmente son aquellas que usamos para cuidar la colita del bebé, debido a que la dermatitis de pañal también es una patología causada por la fricción y el aumento de humedad”.
Estas cremas de barrera pueden ser muy útiles para aquellas personas que deban usar mascarillas por un tiempo muy prolongado, como el personal de salud, por lo que su aplicación antes de la colocación de mascarillas o protectores pueden minimizar las lesiones en la piel.
Para concluir, insistió en la importancia del lavado regular de los tapabocas de tela con jabones suaves. Además de tener en cuenta los cuidados básicos de limpieza, de hidratación y la utilización de cremas de barrera. En caso que las lesiones no mejoren, lo recomendable es consultar con un especialista de manera a optimizar el tratamiento.
San Lorenzo, 28 de agosto de 2020