El Departamento de Nefrología Pediátrica de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Asunción, Hospital de Clínicas tiene un nuevo jefe. El Mg. Dr. Miguel Franco asume la dirección tras la jubilación de la Prof. Dra. Leticia Florentín, quien lideró el servicio desde su creación como unidad independiente en 2012.
El Dr. Franco se compromete a mantener el legado de excelencia y, al mismo tiempo, potenciar el servicio con nuevas iniciativas centradas en la educación médica continua, la prevención y la investigación científica.
Expansión y atención a la demanda. Una de las prioridades de la nueva gestión es ampliar la capacidad de atención. Se planea extender los horarios de consultorio al turno tarde para duplicar el número de atenciones diarias. Esta medida busca responder a la creciente demanda y, fundamentalmente, favorecer la detección temprana de patologías renales en niños, evitando que lleguen a estadios avanzados.
Subrayó que el objetivo es que los niños lleguen antes, que no ingresen a diálisis. “La prevención es clave para evitar que los pacientes lleguen en condiciones avanzadas y limitantes para un eventual trasplante renal. Tenemos actualmente 21 trasplantes renales pediátricos realizados desde la reactivación del programa en diciembre de 2016, luego de una pausa de tres décadas. Queremos seguir creciendo y responder a las necesidades de los pacientes crónicos, tanto con hemodiálisis como con diálisis peritoneal crónica ambulatoria, modalidad que introdujimos en el Hospital de Clínicas desde pediatría en 2017”, expresó el Dr. Franco.
Fortalecimiento de la investigación y la formación. En el eje de la investigación, el Dr. Franco adelantó que se proyecta una mayor producción científica, tanto en la revista académica de la facultad (EFACIM) como en publicaciones indexadas de mayor alcance, consolidando así el perfil académico del servicio.
Entre sus prioridades, también se destaca la implementación de programas de educación médica continua, con el objetivo de capacitar no solo a especialistas, sino también a médicos generales, para favorecer una derivación más oportuna de los casos nefrológicos infantiles. Igualmente, el departamento busca fortalecer la extensión universitaria, articulando acciones con otras unidades del hospital y promoviendo actividades propias en beneficio de la comunidad.
El equipo está conformado por ocho médicos especialistas, médicos residentes, además de un plantel de enfermería capacitado para atender a pacientes trasplantados y dializados. “El servicio trabaja las 24 horas; aunque no contamos con urgencias propias, atendemos internaciones específicas por patologías nefrológicas que ingresan por la Cátedra y Servicio de Pediatría. Además, recibimos pacientes pediátricos de todo el país, muchos provenientes del interior”, añadió el jefe del departamento.
El área cuenta con distintas unidades funcionales: consulta ambulatoria, trasplante renal, hemodiálisis y diálisis peritoneal. En la unidad de hemodiálisis se dispone de seis máquinas y una sala aislada para pacientes infectados. Se atiende actualmente a 6 niños en hemodiálisis, con turnos distribuidos de lunes a sábado. En cuanto a consultas ambulatorias, se atienden entre 10 y 11 niños por día en el turno mañana, de lunes a viernes. La meta es duplicar esa cifra, incorporando el turno tarde. Esta ampliación no solo responde a la demanda, sino que busca detectar de forma temprana las patologías renales en niños, evitando que lleguen a etapas avanzadas o dependan de diálisis.
Consultorio de transición. Finalmente, el jefe de Nefrología adelantó la implementación de un consultorio de transición para adolescentes, a fin de preparar a los pacientes pediátricos que migrarán al servicio de adultos. “Queremos evitar el choque que se produce al cambiar de entorno, de médicos y de dinámicas familiares, especialmente en pacientes trasplantados. Este puente entre pediatría y adultos nos permitirá hablar el mismo idioma y asegurar un mejor seguimiento”, puntualizó.
San Lorenzo, 01 de agosto de 2025